Francisco de Narváez intentará sumar esta semana una cita con otra figura peronista: Alberto Rodríguez Saá. El empresario llegará el viernes próximo a San Luis y ya le avisó al gobernador, aunque no hay ningún encuentro confirmado por ahora. Entre tanto, todavía resuena la reunión con Carlos Reutemann, en Santa Fe, durante la noche del viernes pasado. Lole negó ayer que hubieran alcanzado un acuerdo político para trabajar en algunos temas, aunque reconoció que vio a De Narváez muy entusiasmado y con muchas ganas.
El propio diputado y empresario aceleró los tiempos, y dijo que aspira a un peronismo moderno, que conserve lo mejor de la tradición, mientras que el PRO es un partido vecinalista que aspira a ocupar un territorio nacional, pero que él va a ir a internas dentro del Partido Justicialista. Y es ése el centro del mensaje que lleva el diputado en su gira pre preelectoral por el interior del país, intercalado con visitas al conurbano, como para no descuidar ni su probable candidatura a una fórmula presidencial ni la alternativa de presentarse a la gobernación bonaerense. La opción depende de por lo menos dos factores: si Reutemann decide finalmente jugar en la política nacional, y si la Corte Suprema de Justicia admite la posibilidad de que se postule a la presidencia o vice, a pesar de que no es nacido en el territorio argentino, o hijo de ciudadano nativo, habiendo nacido en país extranjero, como prescribe el artículo 89 de la Constitución Nacional.