La presidenta Cristina Fernández anunció este mediodía la firma de un convenio para la comercialización de trigo y presentó una línea de financiamiento para los pequeños y medianos productores trigueros. En su discurso, la primera mandataria destacó que el Estado está interviniendo en el mercado para ayudar a mantener el precio de la producción nacional.
Se derrumba la teoría de que el Estado impide que se desarrolle el mercado, afirmó la Presidenta. Contra todos los pronósticos, el mercado de cereales viene muy bien, y señaló que, según los cálculos conservadores del sector, quedarán 9 millones de toneladas de maíz en condiciones de ser exportadas, dijo.
La primera mandataria señaló que se trata de un éxito de los productores argentinos y afirmó que también habrá un excedente muy importante en materia de forrajería, vitales para actividades como la cárnica y la avícola.
Cristina Fernández destacó el balance de la actividad agropecuaria y resaltó los números sólidos y fuertes que nos han permitido tener cúmulo de reservas más que importantes. En ese sentido, la jefa de Estado destacó el muy buen año en materia de exportaciones, con un 32 por ciento más que el año pasado, un superávit comercial que se ha producido en el peor año de la economía del mundo.
La Presidenta defendió las políticas del gobierno proclives a generar superávit y obra pública y destacó también la importancia de darles instrumentos a los productores de la Pampa húmeda (Buenos Aires, Entre Ríos, Santa Fe y La Pampa), donde está la mayor producción triguera, para ayudar a que el productor aguante para que no lo esquilmen con el precio.
Sobre el Fondo del Bicentenario, la Presidenta manifestó que fue creado para garantizar con reservas la deuda que tiene que saldar nuestro país y fustigó a algunos que quieren que vuelva a pasar lo que sucedió en el 2001, cuando Argentina se declaró en default.
Cristina Fernández aseguró que el Fondo del Bicentenario para el Desendeudamiento sólo utilizará un tercio de las reservas, no el cien por ciento y señaló que la Argentina necesita imperiosamente salir del default para que las empresas puedan conseguir financiamiento más barato en el mundo.
En el acto, se anunció la decisión de los miembros de la Comisión Nacional de Valores que aprobó la operación de cheques diferidos contra la operatoria de warrants agrario, hecho que permitirá mejorar las condiciones de comercialización y acceso al crédito.
La ceremonia se llevó a cabo, en el salón de actos del Banco Nación, con la presencia del Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, el ministro del Interior, Florencia Randazzo, el ministro de Agricultura, Julián Domínguez; el ministro de Economía, Amado Boudou; la titular del Banco Nación, Mercedes Marcó del Pont y demás autoridades nacionales y provinciales, así como representantes del comercio, la industria, la producción y de dirigentes agrarios.
