Radio en vivo

Hacé click acá y escuchá La Verde FM 94.1 en vivo!

miércoles, 30 de diciembre de 2009

El Acuerdo para la Seguridad Democrática fue presentado por un gran abanico de fuerzas políticas, sociales y académicas‏


A partir de ayer el discurso de la mano dura en materia de seguridad quedó en minoría. También, las respuestas autoritarias frente al delito. Ayer al mediodía, en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso Nacional, se presentó el Acuerdo para la Seguridad Democrática, propuesta de 10 puntos que fue elaborada por el Centro de Estudios Legales y Sociales, el CELS, y respaldada por un amplio e inédito abanico político, social, gremial y religioso. El documento expone las bases doctrinales para un plan futuro de política criminal a nivel nacional, permite ampliar el debate social y enfoca la discusión de la denominada inseguridad sin el facilismo represivo.

Esta debe ser la foto más buscada de la Argentina, dijo Horacio Verbitsky. Con una carcajada, todos los presentes comulgaron con el titular del CELS y orador principal. La escena no daba lugar a dudas. Tras la mesa de especialistas y dirigentes, que incluía a León Arslanian, Estela Carlotto, Laura Conte, Hugo Cañón, Marcelo Saín y Enrique Font, se apostó la nueva multisectorial. Hasta ayer, verlos juntos en una misma iniciativa era impensable, pero lo que las diferencias partidarias deshacen, la preocupación por la seguridad esta vez logró unir. En la primera fila, de izquierda a derecha, estaban entre otros, Francisco Tito Nenna del Encuentro Popular para la Victoria, Victoria Donda de Libres del Sur, Ricardo Gil Lavedra y Ricardo Alfonsín de la UCR, Felipe Solá del Peronismo Federal y Martín Sabatella del Encuentro por la Democracia y la Equidad. Entre Solá y Gil Lavedra, unos metros por detrás, asomaba Aníbal Ibarra de Diálogo por Buenos Aires y a unos pasos sonreía Margarita Stolbizer del Acuerdo Cívico y Social.
El documento está dividido en diez apartados. Cada uno demarca una lectura de situación sobre el problema de la inseguridad y una propuesta distinta sobre la seguridad. De todas maneras, hay un común denominador: la posición democrática. Frente a las posturas reaccionarias, que hacen foco sobre la coerción social y la criminalidad juvenil, en el Acuerdo por la Seguridad Democrática, las fuerzas de seguridad, el Poder Judicial y el Servicio Penitenciario son los puntos centrales de la discusión sobre la seguridad.