La candidata presidencial oficialista Dilma Rousseff, se reunió el miércoles pasado, con el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y aseguró que en caso de ser electa el 3 de octubre, dará prioridad a las relaciones con ese país andino.
En una de sus pocas manifestaciones sobre política internacional, Rousseff destacó la importancia del patrullaje conjunto, de los mil 644 kilómetros de frontera común, entre Brasil y Colombia, y el desarrollo de acciones conjuntas, en materia de energía y comercio.
También expresó su rechazo a la guerrilla de las FARC, y al narcotráfico, pese a que la oposición brasileña, como alguna prensa colombiana, han acusado al gobernante Partido de los Trabajadores, de Rousseff y del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, de tener nexos con esa organización guerrillera.