El canciller cubano, Bruno Rodríguez, afirmó que el Tercer Mundo derrotó a Estados Unidos en su intento por imponer un nuevo orden en materia de lucha contra el cambio climático.
Los países desarrollados intentaban patentar una nueva era que significa olvidar el concepto de responsabilidad compartida, pero diferenciada, y echar sobre los demás países el peso de la situación ambiental, dijo Rodríguez.
En sus palabras el jefe de exteriores cubano, participante en la Cumbre de Copenhague, señaló que el intento derrotado por varios países constituía una repetición de las posiciones más oscuras y un retroceso en relación con Kyoto.
Por lo menos en el Protocolo de Kyoto, que vence el año próximo, había compromisos vinculantes que debían cumplirse, recordó Rodríguez, durante una exposición en la que mostró hojas de los borradores que quiso introducir el presidente Barack Obama, quien no ha cambiado esencialmente la posición norteamericana sobre un acuerdo vinculante sobre el cambio climático, dijo el canciller, en alusión a la ausencia de ese país del tratado adoptado en Japón en 1997. En Copenhague, subrayó, se ha ido al asalto de Kyoto para subvertirlo, pero no pudieron, y destacó en esto las posiciones de Tuvalu, una isla amenazada de desaparecer ante el incremento del nivel del mar, además de Bolivia, Cuba, Nicaragua y Venezuela, que lograran que Estados Unidos y sus aliados no pudieron imponer sus posiciones.
