A pocos días de dejar la presidencia y ante más de 26 mil brasileños concentrados en el Sambódromo carioca, el mandatario Luiz Inácio Lula da Silva no descartó volver y agradeció el gran apoyo popular.
En un acto de despedida que se extendió hasta bien entrada la madrugada, el Presidente brasileño se emocionó en varios momentos de su discurso y en instantes cuando recibía el agradecimiento de diferentes representantes del pueblo, en particular de los más pobres de este estado.
Lula afirmó que trabajará para que Dilma Rousseff, su ahijada política y sucesora en el cargo a partir del 1 de enero venidero, haga un buen gobierno y cuando llegue la hora cierta, veremos que sucede.