El gobierno de Brasil empezó a elaborar un proyecto de ley de medios que estimulará la participación de los ciudadanos en la comunicación, e impedirá que rija solamente la ley del mercado.
La norma –que el ministro de Comunicación Social, Franklin Martins, espera que sea aprobada en 2011, durante el primer año de gobierno de la presidenta electa, Dilma Rousseff– recoge aspectos de la nueva ley argentina sobre medios, en cuanto a la producción de contenidos y la adjudicación del espacio radioeléctrico, y por la normativa contra la discriminación y el racismo aprobada el mes pasado en Bolivia que contempla severos castigos, para quienes divulguen prácticas o manifestaciones en tal sentido.