La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, reiteró hoy su compromiso con el combate a las drogas, especialmente el crack, y exaltó el rol relevante a desempeñar en ese objetivo por los centros regionales de referencia.
-Como presidenta me siento responsable, junto con padres y madres y con toda la sociedad brasileña por el futuro de nuestra juventud, que es la mayor víctima de las drogas-, afirmó Dilma en su habitual programa radial de los lunes Café con la presidenta.
Es por eso que no podemos ser tolerantes, señaló y agregó que los jóvenes tienen un mundo de posibilidades para realizarse, como la práctica de deportes, un buen empleo, convivir con su familia, ir a fiestas, enamorar y el crack le quita todo eso. -Justamente es eso lo que no podemos ni dejaremos que suceda-, sentenció.